El sofá Punta Ala, de geometrías primarias envolventes y rigurosas, presenta una estructura esencial de metal, para formar un nido sólido y ligero al mismo tiempo que alberga las suaves partes de apoyo, aportando una sensación de agradable relax.
Punta Ala establece un diálogo centrado en el contraste entre las rígidas líneas tubulares del bastidor y los volúmenes básicos y suaves, utilizando un léxico marcado por su pureza compositiva, para lograr como resultado un sofá de forma aérea y ligera. El leitmotiv estético está representado por las correas con un diseño de trama y urdimbre agradablemente elaborado, único en su género. En el respaldo se suceden las correas, creadas con una única cinta, formando un trenzado en espiral con un movimiento sin soluciones de continuidad que crea un zigzag dinámico especialmente llamativo. Se logra así una sensación de ligereza y frescura, como una brisa marina que acaricia y vigoriza. Por la originalidad de los signos, con su identidad incuestionable, y la combinación entre relax y placer estético que se percibe a primera vista, Punta Ala es un sofá que cautiva de inmediato: una solución de diseño que reafirma la voluntad de crear modelos con una marcada sensibilidad, protagonistas discretos de una elegancia innata. Es posible integrar en la estructura algunos elementos auxiliares: con salientes mínimos, las mesitas auxiliares de madera maciza, como pequeños promontorios satisfacen las necesidades de apoyo a lo largo de todo el perímetro posterior y lateral del sofá con originalidad compositiva, marcando un ritmo original.
